En 2015 probaba por primera vez eBiblio y en aquella ocasión me quede un poco decepcionada ante las pocas opciones de préstamo, tener que descargarte Adobe Digital Editions y las limitaciones del sistema que existían en aquel momento (ya superadas y solucionadas).
La cuestión es que abandone por completo el tema del préstamo electrónico y más cuando me encanta ir a la biblioteca y pasearme por sus pasillos; pero ante la nueva situación decidí intentar nuevamente el tema de préstamo electrónico. Y nuevamente me he dado con un canto en los dientes porque los Kindles no son compatibles con el sistema con el que funciona eBiblio (¿tendré que esperar otros cinco años y una nueva pandemia para asomarme por la plataforma nuevamente?).
Resignación :(
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