viernes, 26 de abril de 2019

Vitelas: Prejuicios con la Fantasía y Ciencia Ficción

Hasta la fecha pensaba que eran mito, o al menos algo de exageración, que la gente tuviera prejuicios con ese tipo de literatura; pero me he replanteado mi principio al ver la cara de menosprecio condescendiente cuando he comentado un libro de fantasía.
Os pongo un poco en contexto: curso en el que se da cierto postureo filosófico alternativo y en un momento dado (y en mi opinión justificado) propuse un título de un libro de ciencia ficción, en el cual tocaba cierto tema del cual estábamos debatiendo (en ese momento no fui consciente de ningún "careto"). 
Pasadas unas semanas (el curso es largo de narices) vuelvo a comentar otro libro y ese día debía estar un poco más perspicaz de lo habitual y vi cierto gesto que me hizo ver que mi aportación no estaba a la altura de la persona que había hablado de Foucault o Sassen (con todos mis respetos).

Lo cierto es que llevo días cabreada, porque a esta misma gente se le llena la boca con el tema de los estereotipos y los prejuicios para luego encontrarte de narices con las caras de indulgencia (ya soy la friki loca de libros no-sesudos, y, a mucha honra, llevo todos los días mi chapa de #CómoOdioGigamesh).

Podría defenderme diciendo que la fantasía es un modo de analizar formas de gobierno, roles y perspectivas sociales desde una lejanía que te permite experimentar, que existe lo que llaman Ciencia-Ficción social... que existen estudios que ratifican el desarrollo mayor de empatía entre los/as lectores/as de estos géneros. Y que cuando lees una novela  asumes que lo que te narran es ficción, por lo que a mi modo de ver es solo una cuestión de grados.

Ya me he desahogado y me voy a leer mis últimas adquisiciones de Sant Jordi (por supuesto de fantasía).

No hay comentarios:

Publicar un comentario