"Este es un cuento de fantasmas. Todo lo que en él se relata es verdad. Y no me importa confesar que durante muchos años después de los sucedido algunos de nosotros no nos atrevimos a pasar solos de noche por ese lugar."
Charlotte Brontë, Elizabeth Gaskell, Dinah Mulock (Mrs. Craik), Catherine Crowe, Mary Elizabeth Braddon, Rosa Mulholland, Amelia B. Edwards, Rhoda Broughton, Mrs. Henry Wood, Vernon Lee, Charlotte Riddell, Margaret Oliphant, Lanoe Falconer, Louisa Baldwin, Violet Hunt, Mary Cholmondeley, Ella D'Arey, Gertrude Atherton, Willa Cather y Mary E. Wilkins (Freeman) son las veinte escritoras que recoge este libro.
Un recorrido cronológicamente ordenado (comienza en 1833 y culmina 1903) que nos adentra en historias habitadas por fantasmas y cosas paranormales, de noches oscuras, mansiones misteriosas y toda la iconoclasia que rodea este tipo de cuentos.
Se trata de una vuelta a los orígenes del terror que quizás algunos lo vean como obsoleto, pero que me parecen imprescindibles no solo por ver como ha evolucionado los elementos asociados a este género, sino también como herramienta para visualizar a las mujeres que se dedicaron a escribir y publicar durante la época victoriana.
Ahora bien, abstenerse gente que espere de estas narraciones grandes efectos y giros argumentales, porque de eso no va este libro; esta recopilación es para disfrutar pausadamente.
Al principio puede costar un poco hacerse con el ritmo narrativo, pero si os dejáis llevar por las historias, por la narración pausada y respetáis que la escritora vaya construyendo poco a poco los elementos para preparar el camino para el clímax podréis descubrir fabulosas historias clásicas de terror.
Y para terminar dejarme proponer un cliché: probar a leer alguna historia por la noche cuando todos están ya acostados.
| Autor | Varias Autoras |
| Editorial | Impedimenta |
| Precio Aprox. | 27 Eur. |
| Sentimiento* | A la luz de una fogata |
| Valoración |  |
| Obtenido en | Bibliotecas de Barcelona |
Fe de erratas: en la 2º edición de febrero de 2018:
- Pág 516: "Pero el inmueble e encontraba en perfecto estado: no había desperfecto alguno..."
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