"Durante muchos años nadie imaginó que el Problema de las Salamandras pudiese tener algún día una gran importancia internacional, y que quizá fuese preciso negociar con ellas no sólo como con seres inteligentes, sino también como una colectividad o una nación."
Después de terminar el libro, aún no tengo una opinión sobre cómo valorar la lectura; puedo decir que es extraña, ecléctica, que me ha perturbado, que me ha parecido tan desquiciante (pero plausible), dura a ratos y totalmente esperpéntica a otros que me siento desbordada.
En esta novela sarcástica (aunque creo que el término se queda corto) se carga contra todo: el dominio económico, el etnocentrismo, el matrimonio (y los roles masculino/femenino), la esclavitud, el colonialismo, la explotación laboral (con mención a los luditas), la idea de colectividad... y así un sin fin de temas más que es capaz de tocar.
El hecho que da el pistoletazo de salida a todo el despropósito que se genera es el descubrimiento de una especie de salamandra gigante. En un primer momento se utilizan para coger perlas; pero cuando el mercado de la perla se desploma por el superávit el paso siguiente es la comercialización de mano de obra barata (solo hay que alimentarlas). A partir de aquí se genera toda una infraestructura de transporte, criaderos, piratería, se crea la bolsa de las salamandras (que establece el precio según la categoría)... sin embargo, en ningún momento se les reconoce como seres o nación y aunque se plantean temas como los derechos, la educación de las salamandras, la responsabilidad jurídica.. estos temas quedan desestimados por tecnicismos, se alargan en la burocracia o son simples tentativas de domesticarlas (un poco como los buenos cristianos que fueron a evangelizar a las tierras salvajes).
La situación sigue avanzando, la población de salamandras se va multiplicando vertiginosamente, lo que genera más mano de obra, con lo que la humanidad parece vivir en una época dorada de crecimiento económico: ya no hay limites geográficos (se puede crear costas e islas artificiales), los agricultores tienen la cosecha vendida para alimentar a las salamandras... hasta que todo estalla y las salamandras (armadas y con una gran superioridad numérica) toman el control y todo estalla.
Todo este proceso es narrado a través de diferentes personajes, recortes de prensa, actas de sindicato, informes científicos o policiales, manifiestos... que nos dan una visión global sobre un problema que es gestionado de modo local (únicamente se ponen de acuerdo al tratar de economía, vamos como sucede normalmente). Además de dejar reflejada la estupidez humana y el poco futuro que tenemos como especie, porque no olvidemos que "La historia se repite con los mismos resultados" (pág 159).
Autor | Karel Čapek |
Editorial | Hiperión |
Precio Aprox. | 14 Eur. |
Sentimiento* | Chiss, chips, chiss... |
Valoración | |
Obtenido en | Bibliotecas de Barcelona |
Fe de erratas: tercera edición 2007:
pág 59- "Pero, espera, para que me creas, te daré un recibo como que deb esos doce francos, ¡te parece'""
pág 150- "Para evita malas interpretaciones, quieremos recordar que la carne de la salamandra no es comestible."
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