Sinceramente no me apetecía nada leer este libro; no me llamaba nada ni el título (que me hacía pensar en el picnic electrónic, y eso que no me gusta ese tipo de música), ni la portada, los autores tampoco los conocía (vale aquí ya peco de incultura en Ciencia-Ficción, pero como se suele decir "ye lo que hay")... y por supuesto, tampoco me había a parado a leer la sinopsis.
Con este panorama ha pululado el libro por mi casa durante más de un mes, pero ante la insistencia de la parte contratante para poder comentar el final (lo que tiene que hacer una para que le dejen un poco en paz) acabe claudicando y leyendo el dichoso libro.
Y la verdad es que muy interesante desde el planteamiento que comienza la novela: unos extraterrestres nos han visitado y se han marchado, pero han dejado una zona con muchas anomalías y en ella hay una serie de objetos que no sabemos qué son, ni que funcionalidad tiene.
Para estudiar todo esto se crea el Instituto Internacional de Culturas, pero alrededor de la zona también crece un modo de buscarse la vida: son los stalkers, hombres que se adentran en la zona para sacar objetos que luego revenden (algunas veces incluso al propio Instituto).
A lo largo del libro se va dilucidando varios temas interesantes: por un lado si viniera una raza extraterrestre podríamos comunicarnos con ellos, ¿comprenderíamos su tecnología, cultura...?; por otro lado tiene un aporte más emocional con el tema de la búsqueda de la felicidad y la lucha contra los condicionamientos sociales.
La novela comienza con la entrevista al doctor Valentine Pillman, la cual te da las claves para comprender que ha pasado y en qué punto se encuentra la humanidad en relación a la Visitación. Después, la historia se centra en Redrick, un stalker el que iremos siguiendo a lo largo de los años.
Durante la lectura he tenido altibajos, a ratos me parecía muy interesante, otros no acababa de encajar a los diferentes personajes y a veces pensaba que me faltaban elementos de análisis para poder hacerme un mapa de lo que estaba pasando en las bambalinas de la historia.
Sin embargo, vuelvo a repetir que me parece un punto de arranque interesante y además el libro cuenta con el atractivo de tener una introducción hecha por Ursula K. Le Guin y unos comentarios finales de Boris Strugatski; el cual hace un recorrido sobre los años de lucha para poder publicar la novela, ya que estuvo censurada en la Unión Soviética.
Y el final? pues cada uno que saque sus conclusiones, y respecto a la parte contratante...
Con este panorama ha pululado el libro por mi casa durante más de un mes, pero ante la insistencia de la parte contratante para poder comentar el final (lo que tiene que hacer una para que le dejen un poco en paz) acabe claudicando y leyendo el dichoso libro.
Y la verdad es que muy interesante desde el planteamiento que comienza la novela: unos extraterrestres nos han visitado y se han marchado, pero han dejado una zona con muchas anomalías y en ella hay una serie de objetos que no sabemos qué son, ni que funcionalidad tiene.
Para estudiar todo esto se crea el Instituto Internacional de Culturas, pero alrededor de la zona también crece un modo de buscarse la vida: son los stalkers, hombres que se adentran en la zona para sacar objetos que luego revenden (algunas veces incluso al propio Instituto).
A lo largo del libro se va dilucidando varios temas interesantes: por un lado si viniera una raza extraterrestre podríamos comunicarnos con ellos, ¿comprenderíamos su tecnología, cultura...?; por otro lado tiene un aporte más emocional con el tema de la búsqueda de la felicidad y la lucha contra los condicionamientos sociales.
La novela comienza con la entrevista al doctor Valentine Pillman, la cual te da las claves para comprender que ha pasado y en qué punto se encuentra la humanidad en relación a la Visitación. Después, la historia se centra en Redrick, un stalker el que iremos siguiendo a lo largo de los años.
Durante la lectura he tenido altibajos, a ratos me parecía muy interesante, otros no acababa de encajar a los diferentes personajes y a veces pensaba que me faltaban elementos de análisis para poder hacerme un mapa de lo que estaba pasando en las bambalinas de la historia.
Sin embargo, vuelvo a repetir que me parece un punto de arranque interesante y además el libro cuenta con el atractivo de tener una introducción hecha por Ursula K. Le Guin y unos comentarios finales de Boris Strugatski; el cual hace un recorrido sobre los años de lucha para poder publicar la novela, ya que estuvo censurada en la Unión Soviética.
Y el final? pues cada uno que saque sus conclusiones, y respecto a la parte contratante...
| Autor | Arkadi i Boris Strugatski |
| Editorial | Gigamesh |
| Precio Aprox. | 16 Eur. |
| Sentimiento* | Imprescindible en pícnics |
| Valoración |  |
| Obtenido en | Bibliotecas de Barcelona |
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