"Però només un ull amb brossa, un dit arrencat o una dent malalta poden sentir-se, poden tenir conciència de la individualitat: un ull, un dit o una dent sans és como si no existiessin. No queda clar que la consciència és una malaltia?"
El sistema educativo fracasó estrepitosamente conmigo en lo que se refiere a conceptos matemáticos; pero si algo me quedo grabado a fuego son los números imaginarios (el nombre me parecía sugerente, aunque en su origen fue dado como algo despectivo). Aún no me explico, y tampoco tiene ningún sentido, el cariño que les cogí (creo que fue de los pocos exámenes que conseguí sacar algo más que un aprobado raspado). Por ello cuando durante la lectura he visto que el protagonista buscaba la solución de √-1(i) ha saltado a mi mente un montón de conceptos que pensaba aniquilados hace tiempo.
Y ¿qué hace un personaje buscando la solución de √-1? Si lo ponemos en contexto podríamos hacer una referencia directa a la relación de la búsqueda de esa esencia, aquello anhelado o imaginario que pensamos que conforma la esencia de nosotros; ese elemento que unido a los números reales conforme nuestra complejidad. Y, en definitiva, la novela recoge el diario (en algunos momentos desquiciado) de esa búsqueda vital y angustiosa en un mundo totalmente lógico y ordenado gobernado por un Estado Único.
Imaginaros un mundo gobernado por el Taylorismo, donde la organización diaria está controlada por tablas que especifican qué hacer y durante cuanto tiempo (persiste un pequeño fallo aún no eliminado de dos horas diarias personales). Allí todos se levantan a la misma hora, se acuestan, comen... Todo se hace según las tablas horarias. No existe la intimidad pues todo es de cristal y conceptos como "yo" o "tú" han sido eliminados por "nosotros". Los sueños, el alma o la religión han sido extirpados de esta sociedad perfecta, de este mundo matemático e infalible.
Sin embargo, todo tiembla cuando D-503 se enamora perdidamente de I-330 y empieza a desear, a tener celos, anhelar libertad... Además, de la mano de I-330 conocerá la resistencia y otros modos de vivir fuera del Estado Único.
La novela aborda muchos temas: la alienación, la deshumanización, la represión... pero también el anhelo de los sentimientos más profundos, el deseo de libertad, de búsqueda de quienes somos (casi al final del libro se lanza la pregunta filosófica por esencia: "¿Quiénes somos nosotros? ¿Quién soy yo?"). Pero quizás, el elemento, que para mí, más presencia tiene en toda la novela es la soledad (no la individualidad que parece más obvia); el protagonista narra todas sus vivencias en un diario a solas, es un elemento aislado del conjunto por ese sentimiento de diferencia y aún, cuando cambia un nosotros-estadounico por un nosotros-revolucionario no consigue desvincularse de su soledad.
En todo este barrido existencia que hace Zamiatin sorprende que sea capaz de encajar en un mundo totalmente matemático un lenguaje tan poético, lleno de metáforas e imágenes (pájaros, flores, colores... son una constante en sus páginas). Cono contrapunto a todo estos elementos poéticos, tenemos en algunos momentos un lenguaje oscuro, caótico y lleno de confusión (no olvidemos que estamos leyendo un diario de alguien perdido) que hace difícil seguir los acontecimientos (en un principio me molestaba estar perdiéndome algo de la trama, hasta que lo asumí como un elemento más de la novela).
Por la trama seguro que habéis asociado "Nosotros" con "1984" (Orwell admitió la influencia de esta novela) o "Un mundo feliz" (Huxley nunca se pronunció al respecto), pero es que bastante anterior (1929) y debería incluirse dentro de las grandes distópicas del sXX.
Autor | Ievgueni Zamiatin |
Editorial | Males Herbes |
Precio Aprox. | 19 Eur. |
Sentimiento* | Soledad |
Valoración | |
Obtenido en | Bibliotecas de Barcelona |
PD: Yo he leído la edición en catalán de Males Herbes, pero la edición en castellano de Salamandra cuenta con una introducción de Margaret Atwood.
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