Los autores nos conducen hace una tierra llamada Sularin, donde existen veinte dioses, que cuenta con inmortales para realizar diversas tareas en el mundo de los mortales (djins, ángéles, diablos....) y que se organizan jerárquicamente según su dios establece.
En esta primera entrega se centra en Akran, el dios errante, que ordena que dos tribus enemigas (clan hrana y clan akar) unan sus esfuerzos y convivan hasta que la rosa del desierto florezca. Para asegurarse que las tribus obedezcan, hace que los dos hijos de los jefes se casen; con todos los problemas que eso conlleva.
Pero, sumado a los problemas de convivencia de estas tribus enemigas, nos encontramos las intrigas de los diferentes djins que harán que se complique aún más la trama. Sobre todo Pukah, que al intentar lograr méritos ante su dios no hace más que crear las circunstancias ideales para que se produzca un enfrentamiento armado con otra de las tribus.
Por otro lado, están desapareciendo seres inmortales y los dioses se encuentran además, ante un peligro mayor al perder seguidores y con ello su fuerza. Cada dios se ve obligado a realizar acciones para asegurarse su supervivencia y saber que pasa con sus inmortales desaparecidos...
Al principio puede crear mucha confusión el adentrarse en este mundo de fantasía, sobre todo por la jerarquía que tienen todos los dioses y demás inmortales; además de sumar todos los personajes que van apareciendo dentro de las diferentes tribus y que adoran a diferentes dioses. Pero superado este primer handicap, es un mundo increíble y lleno de matices.
| Autor | Margaret Weis y Tracy Hickman |
| Editorial | Timun Mas |
| Precio Aprox. | 15 Eur. |
| Obtenido en | Intercambio |
| Valoración |  |
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